Sabías que en el momento que recibes a CRISTO en tu corazón, para hacerlo tu único y suficiente salvador personal, estas llevando a cabo el más MAJESTUOSO acto de FE que ser alguno puede realizar, el cual consiste, que desde ese momento, pones toda tu vida en manos de alguien a quien no ves, pero que espiritualmente estas seguro de su existencia, así mismo con esa FE debemos desarrollar una inmensa con fianza en JEHOVA UNICO DIOS EXISTENTE Y VIVIENTE, la cual nos llevara a vivir en una relación estrecha, con el PADRE, EL HIJO Y EL ESPIRITU SANTO, y una vida cristiana plena, la cual nos llevara a alcanzar todas nuestras metas, mientras estemos en esta tierra.
La Biblia habla a menudo de la importancia de la fe
en el conocimiento de Dios. Por ejemplo, Efesios 2:8 enseña: “Porque por gracia
ustedes han sido salvados mediante la fe”. Primera de Corintios 13:13 añade:
“Ahora, pues, permanecen estas tres virtudes: la fe, la esperanza y el amor.
Pero la más excelente de ellas es el amor.” Pero, ¿por qué Dios requiere fe?
Una forma de responder por qué Dios requiere fe es
porque Él es nuestro Padre Celestial. Nuestra relación con él es similar a
otras relaciones en el sentido de que incluye la confianza en la otra persona,
el tiempo juntos, el amor y el respeto. Debido a que no podemos conocer
plenamente a otra persona, y mucho menos a un Dios infinito, todas las
relaciones requieren de un cierto grado de fe (confianza). Dios es nuestro
Padre y se necesita fe para creer que Dios nos ama y que Él provee para
nuestras necesidades.
La fe es importante también porque Dios no es
visible para la humanidad. Hebreos 11:1 nos enseña: “Ahora bien, la fe es la
garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.” No podemos ver a
Dios (Juan 1:18). No obstante, tenemos fe en Él que proporciona seguridad.
La fe es necesaria para agradar a Dios. Hebreos
11:6 indica: “En realidad, sin fe es imposible agradar a Dios, ya que cualquiera
que se acerca a Dios tiene que creer que él existe y que recompensa a quienes
lo buscan.” La fe no solamente le agrada a Dios, conduce a galardones—la vida
eterna, recompensas celestiales, y la experiencia de la plenitud de la vida en
la tierra (Juan 10:10).
La fe es importante para que los creyentes
obedezcan al Señor. Por ejemplo, a Adán y Eva se les había dado una orden a no
comer de una fruta en particular (Génesis 2:15-17). Debido a que su fe vaciló
con respecto a este mandato, se comieron el fruto prohibido y pecaron. En
contraste, Santiago 2:23 comparte, “Le creyó Abraham a Dios, y esto se le tomó
en cuenta como justicia”.
Dios requiere la fe, ya que permite a los humanos
la capacidad de elegirlo o rechazarlo. Sin la capacidad de elegir, la humanidad
dejaría de ser humana tal como la conocemos. Porque la gente puede optar por
tener fe o no tener fe, hay una manera de que Dios pueda saber quiénes son los
que han creído en Él y quiénes no.
La fe en Dios no es "fe ciega", como
algunos sostienen. Sino es una elección basada en la información disponible. La
Biblia, el mundo creado, las vidas cambiadas de los creyentes, Jesucristo, y
otras maneras en que Dios actúa en nuestro mundo constituyen una prueba
suficiente para que la gente elija la fe en Dios. Como Jesús enseñó en Lucas
16:31: “Si no les hacen caso a Moisés y a los profetas, tampoco se convencerán
aunque alguien se levante de entre los muertos.
DEJA QUE LA PALABRA DE DIOS ACTIVE TU FE
(POR RICK WARREN)
“La fe viene como resultado de oír el mensaje, y el
mensaje que se oye es la palabra de Cristo.” (Romanos 10:17 NVI)
La mayoría de nosotros no somos seguros ni
valientes. La mayoría de nosotros tenemos muchos miedos. Tenemos miedo a asumir
riesgos, miedo al fracaso y miedo de morir. Nosotros no estamos caminando con
confianza porque no somos gente de fe.
¿Quieres ser una persona de fe? La fe es la Palabra
de Dios activada. La Biblia dice en Romanos 10:17, "La fe viene como
resultado de oír el mensaje y el mensaje que se oye es la palabra de
Cristo" (NVI).
Si has leído alguna vez un versículo en la Biblia y
de repente pensaste, "¡Yo puedo hacer esto! ¡Yo puedo hacer esto!" Tu
fe ha sido activada por la Palabra de Dios.
Es la diferencia entre la Biblia y los libros de
autoayuda. Los libros de autoayuda generalmente brindan información útil.
Pueden decirte lo que debes hacer, pero simplemente no te da el poder para
hacerlo. Los libros de autoayuda dicen que debes dejar de preocuparte o que
debes renunciar a todos tus malos hábitos. Eso sí es útil, pero no tienen el
poder para cumplir con el consejo. Esos libros no están vivos.
Pero la Palabra de Dios no sólo te dice qué hacer;
sino que te da el poder para hacerlo y aumenta tu fe para hacerlo.
Cuando leí las miles de promesas en la Biblia donde
Dios dice que Él va actuar en nuestro nombre si le obedecemos de alguna manera,
eso me da confianza. Sé que si hago lo que Dios me pide, Él ha prometido un
cierto resultado.
Durante la mayor parte de 1981 estuve deprimido. Me
acababa de mudar al Sur de California para iniciar Saddleback un año antes.
Estaba agotado emocionalmente, mentalmente, físicamente y espiritualmente. Me
sentía como si hubiera una nube sobre mi cabeza de la cual no podía escapar.
Nunca voy a olvidar algunos de los versículos que
realmente activaron mi fe: Éxodo 23:29-30 dice: “Sin embargo, no los desalojaré
en un solo año, no sea que, al quedarse desolada la tierra, aumente el número
de animales salvajes y te ataquen. Los desalojaré poco a poco, hasta que seas
lo bastante fuerte para tomar posesión de la tierra.”
Dios había prometido a los Israelitas la Tierra
Prometida. Iban a cruzar el río Jordán en Israel y a tomar algunas tribus que
ya vivían allí. No pensaban que podrían hacerlo. Pensaban que el objetivo era
demasiado grande.
En Éxodo 23:29-30, Dios les está diciendo a los
Israelitas, "¿Conoces estos enemigos? Son más grandes que tú, pero no les
voy a dar toda la tierra en el primer año. Van a irla tomando poco a poco, una
batalla a la vez. Se van a ir haciendo más fuertes. Cuando sean lo
suficientemente fuertes para manejar todo, entonces lo tendrán todo."
Cuando leía estos versículos, era como una promesa
directa para mí. Me di cuenta que no
tenía que hacerlo todo en el primer año. Voy a pasar el resto de mi vida
sirviendo a Jesucristo y lo haré en Su horario y a Su ritmo.
Ese entendimiento me dio confianza para asumir
metas enormes. La Palabra había activado mi fe. La palabra de Dios puede
activar tu fe, también.
Reflexiona Sobre Esto
- ¿Qué quieres que Dios realice en tu vida? QUE ME BENDIGA.
¿Crees que Él lo hará? SIN DUDA ALGUNA.
- ¿Qué piensas que Dios quiere cumplir en tu vida?
SU VOLUNTAD
¿Estás
confiado de que Él te dará lo que necesitas? A PARTIR DE ESTE DÍA, EL ME DARÁ SU BENDICIÓN, YA QUE ASÍ SE LO PEDÍ, EN EL NOMBRE DE CRISTO JESÚS Y EL ESPÍRITU SANTO, CON FE, CON
CONFIANZA, CON AMOR Y SIN DUDAR
- ¿Cuál de las promesas de Dios estás reclamando el
día de hoy? QUE ME BENDIGA ESPIRITUAL, MENTAL, CORPORAL FÍSICA Y ECONÓMICAMENTE MI VIDA, PARA SERVIR EN SU OBRA EL RESTO DE MIS LARGOS AÑOS EN ESTA TIERRA, Y DE
ESTA FORMA, LOGRAR EL PROPÓSITO QUE EL TIENE PARA MI, EN ESTE MUNDO, SEGÚN SU GRANDIOSA Y MARAVILLOSA VOLUNTAD. AMEN.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario