sábado, 31 de diciembre de 2016

RAZONES PARA AMAR LA SANA DOCTRINA


Recientemente hablé con un pastor, el pastor Fernando, que me dijo con gozo que 450 personas dejaron su iglesia de 600. ¿Por qué estaba feliz?
Fernando llevaba años predicando un mensaje de prosperidad y prometiendo sanidad a su iglesia. Y a su redil le encantaba. Pero luego dos de sus hijos murieron en un período corto de tiempo, uno de violencia y el otro de enfermedad. Su mensaje de prosperidad empezó a desmoronarse. ¿Dónde estaba la bendición de Dios? ¿Por qué le estaba pasando esto?

Dios le reveló al pastor Fernando que él estaba predicando un falso mensaje que hizo daño a su congregación y los dejó sin preparación al enfrentarse a la profunda realidad del sufrimiento. Predicar esta doctrina falsa parecía dar resultados a corto plazo, pero a la larga estaba llevando a la gente tras riquezas y bendiciones que la Biblia nunca promete, y quitando el enfoque de las promesas mayores de las Escrituras.

La iglesia necesita sana doctrina para poder enfrentar las complejidades de la vida y de la fe. 
LA SANA DOCTRINA ES enseñanza escritural de verdades teológicas”[1]. Añadir el término sano a doctrina aguza la definición con las ideas de “saludable” o “adecuado”[2]. Por tanto, una definición de lo que la Biblia quiere decir cuando habla de sana doctrina es la siguiente:
LA SANA DOCTRINA ES LA ENSEÑANZA BÍBLICA Y ADECUADA DE VERDADES TEOLÓGICAS QUE LLEVAN A LA SALUD ESPIRITUAL Y A VIDAS TRANSFORMADAS TANTO DE LOS INDIVIDUOS COMO DE LA IGLESIA.
La sana doctrina debe ser el contenido de cada sermón, de cada estudio bíblico, de cada canción y de cada libro que leamos en la iglesia. Y debemos amarla. Aquí hay algunas razones por que hacerlo:
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE DIOS AMA LA SANA DOCTRINA.
Las Escrituras ordenan que los líderes  “retengan la palabra fiel que es conforme a la enseñanza” y que “sean capaces también de exhortar con sana doctrina y refutar a los que contradicen” (Tito 1:9). La sana doctrina fluye de las palabras de Dios y de su voluntad revelada en las Escrituras. Dios nos dio Su Palabra y sana doctrina para que podamos conocerle, amarle, obedecerle, y enseñar a otros acerca de Él y de lo que Él ha hecho por nosotros en Cristo. Amémosla porque le amamos a Él.
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE HACE MADURAR TANTO A LOS INDIVIDUOS COMO A LA IGLESIA.
La doctrina que no es sana trastorna la fe, extravía a la gente, y finalmente nos hace perder el tiempo, como le sucedió al pastor Fernando. Enseñar sana doctrina lleva a la madurez espiritual, tanto en individuos como en la iglesia en su conjunto (Efesios 4:11-14). Conforme nos alimentamos de sana doctrina, vamos teniendo menos gusto por la teología que da comezón de oír pero que luego nos deja insatisfechos y necesitados de lo que verdaderamente necesitamos. La sana doctrina hace crecer nuestra fe y nos lleva a invertir el tiempo sabiamente para Cristo y Su Reino, haciendo madurar a la gente y a la iglesia a la imagen de Cristo.
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE FLUYE DEL EVANGELIO.
En 1 Timoteo 1:11, Pablo dice que la sana doctrina es “según el glorioso evangelio del Dios bendito”. El evangelio es un mensaje para ser proclamado y enseñado. La sana doctrina es la sustancia de la verdadera enseñanza del evangelio. Nuestro amor por el evangelio debería estar fuertemente atado con el amor por la sana doctrina, ya que comunica las verdades del evangelio que traen salvación a los oyentes (1 Timoteo 4:16).
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE NOS LLEVA A LA SANTIDAD.
1 Timoteo 1:10 nos dice que existe una forma de vivir que es contraria a la sana doctrina. La doctrina correcta está ligada a la manera correcta de vivir, y esto es lo que quiere decir Pablo cuando habla del “pleno conocimiento de la verdad que es según la piedad” (Tito 1:1). La sana doctrina nos enseña acerca de un Dios santo y que está airado con el pecado, pero que nos ama lo suficiente como para sacrificar a Su Hijo en nuestro favor, para librarnos de ese pecado. La sana doctrina de un Dios santo produce gente santa.
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE NOS GUARDA DE LA FALSA DOCTRINA.
Las Escrituras apuntan a tres fuentes de doctrina: los demonios (1 Timoteo 4:1), los hombres (Mateo 15:9), y Dios mismo (Tito 2:10). La sana doctrina fluye de Dios mismo, y es incorruptible y dadora de vida. La sana doctrina es un ancla de verdad que nos guarda de ser “llevados de aquí para allá por todo viento de doctrina” (Efesios 4:14). El amor por la sana doctrina será un “escudo de verdad” contra las mentiras y las doctrinas del enemigo, que son rampantes hoy día, incluso en muchas iglesias.
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE NOS LLEVA A LA ACCIÓN.
Las Escrituras preparan a los hombres y a las mujeres para toda buena obra (2 Timoteo 3:17). Del mismo modo, una enseñanza sana de las doctrinas de las Escrituras cataliza tanto el servicio como el testimonio, al instalar una convicción profunda y un gozo real en la vida de los cristianos. Escuchar la verdad de las Escrituras enseñada claramente, exaltará la misericordia y la gracia de Dios, lo cual hará que estemos agradecidos y obedezcamos Sus mandamientos para ser luz en el mundo y proclamar el evangelio, “adornando la doctrina de Dios nuestro Salvador” (Tito 2:7-10).
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE ESTO SIGNIFICA AMAR A CRISTO MISMO.
Nada me hace tener que contenerme como cuando escucho a los cristianos decir: “no necesito doctrina, ¡solamente quiero amar a Jesús!”. Esta gente no entiende que la doctrina es la que nos habla de Jesús, que es la Verdad hecha carne (Juan 14:6). Jesús vino a predicar (Marcos 1:38). Su predicación incluía comunicar doctrina que proclamaba quién es Él y cómo deben vivir sus discípulos en relación con Él y con el mundo.
DEBEMOS AMAR LA SANA DOCTRINA PORQUE AL FINAL NOS LLEVA A LA ADORACIÓN.
Contemplar las verdades acerca de Dios y Sus obras entre los hombres nos hace maravillarnos con asombro de su bondad (Salmos 107). La adoración no es solamente el resultado de la doctrina: es la razón por la que la doctrina existe. Pablo ejemplifica esto concluyendo una de las porciones más ricas de las Escrituras en cuanto a doctrina con la siguiente doxología: ”¡Oh, profundidad de las riquezas y de la sabiduría y del conocimiento de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios e inescrutables sus caminos!” (Romanos 11:33).
DIOS QUIERE QUE LA SANA DOCTRINA LLENE LA IGLESIA CON CREYENTES SANTOS, QUE EXALTEN Y PROCLAMEN A CRISTO Y QUE MADUREN DIARIAMENTE EN EL CONOCIMIENTO DE DIOS Y LA OBEDIENCIA A ÉL.
El pastor Fernando ha aprendido mucho desde que dejó de predicar el mensaje de prosperidad y comenzó a centrarse en enseñar las Escrituras. Aunque mucha gente ha abandonado la iglesia, nuevas personas han venido, ansiosas por escuchar la vedad. Los adolescentes que solían sentarse en la parte de atrás de la iglesia y enviar mensajes de texto durante el servicio se han movido ahora a las filas de adelante y han comenzado a servir y a alcanzar su comunidad. Este es un cuadro de la sana doctrina en acción. Enseñar sana doctrina es importante.
EL LUGAR DONDE COMIENZA LA SANA DOCTRINA
Aunque estudiar doctrina en la iglesia local es una forma fantástica de crecer, quizás lo más importante que podemos hacer diariamente es estudiar las Escrituras con fidelidad y cuidado. Conforme hemos entrenado a pastores en el programa Pastores Entrenando a Pastores, hemos visto que a menudo el crecimiento en la sana doctrina viene cuando la Palabra derriba las doctrinas que no son sanas, que están enraizadas en un marco teológico defectuoso, en valores culturales específicos, o simplemente.
EN NO LEER LAS ESCRITURAS EN SU ADECUADO CONTEXTO HISTÓRICO, BÍBLICO Y LITERARIO.

Prestemos atención al mandamiento de Pablo en 2 Timoteo 1:13 y “retengamos la norma de las sanas palabras que hemos oído, en la fe y en el amor en Cristo Jesús”.

viernes, 30 de diciembre de 2016

¿QUÉ ES LA SANA DOCTRINA CRISTIANA?


SANA DOCTRINA.La respuesta que demos a esta interrogante, puede hacer que nuestras vidas se muevan dentro o fuera de la perfecta voluntad de Dios (Salmo 25:4) de allí que es impostergable que pensemos en ello y demos una respuesta clara y basada en la verdad.

El término SANO está estrechamente relacionado con el concepto de SALUD , y alguien que disfruta de salud se encuentra saludable, libre de enfermedad, también con las ideas de no contaminado ni adulterado, por lo que disfruta de bienestar completo, que como organismo vivo funciona bien, cumpliendo con todas sus funciones vitales.

El concepto de DOCTRINA, se explica en palabras sencillas entendiéndolo como ENSEÑANZA, que es el proceso de instruir o dar conocimiento sobre un tema en forma metódica y ordenada; permítanme ampliarlo un poco más; la enseñanza es la acción y efecto de enseñar (instruir, adoctrinar y amaestrar con reglas o preceptos). Se trata del sistema y método de dar instrucción, formado por el conjunto de conocimientos, principios e ideas que se enseñan a alguien.
La enseñanza implica la interacción de tres elementos: el profesor (docente o maestro); el alumno, (discípulo o estudiante); y el sujeto u objeto del cual procede la fuente confiable de conocimiento, en este caso la Biblia (Los escritos de todos los Autores inspirados por Dios y los Principios Divinos de conducta, la historia, los modelos y las promesas que contiene en sus 66 libros).
Si tratamos de encontrar un concepto adecuado a partir de estas dos palabras diremos que la “SANA DOCTRINA” O “SANA ENSEÑANZA CRISTIANA”, es el proceso de instrucción a través del cual un maestro INSTRUYE o enseña con preceptos y reglas a sus alumnos en el aprendizaje del conocimiento de Dios, el hombre y la creación mediante el uso de Su Palabra Escrita : La Biblia; única y final revelación autorizada del Padre celestial por estar total y completamente inspirada por El Espíritu Santo, inerrante y perfecta (II Timoteo 3:16) ; de allí que El Espíritu Santo será nuestro maestro por excelencia (Juan 16:13), y el usará hombres dóciles a Su guianza y sabiduría ( I Timoteo 3:1-7) . En el Nuevo Testamento, el maestro y escritor bíblico Pablo (Colosenses 1:1), habla repetidamente en sus epístolas sobre la sana doctrina como un concepto y como un principio de vida conocido y usado en la iglesia primitiva por todos los verdaderos cristianos que debían luchar en contra las herejías propias de su tiempo; algunos textos de su autoría que hablan de este concepto son Tito 1:9; 2:1, I Timoteo 1:10; 4:3 y sobre doctrinas adulteradas Pablo en Efesios 4:14 y I Timoteo 1:3, y Dios mismo le habla a la iglesia de Pérgamo a través de Juan, sobre la perversa Doctrina de Balaam en Apoc. 2:14.El conocimiento y enseñanza de la Sana Doctrina es la mejor manera de luchar contra las herejías y falsas enseñanzas que hoy se enseñan encubierta y públicamente a la Iglesia y en la iglesia, esto es parte del propósito de dar conocer la Sana Doctrina hoy, pues necesitamos estar preparados para dar defensa ante todo aquel que nos pida razón de nuestra fe (I Pedro 2:15), y oponernos a los falsos maestros que enseñan sus herejía destructoras. El efecto de la sana Doctrina en el cristiano que la recibe y vive por ella, es ser alimentado y nutrido en el conocimiento de la persona Dios, Su plan eterno para con el hombre y su creación, acerca del origen hombre como un ser viviente y el propósito de su existencia sobre esta tierra como nueva Criatura redimida por Él, etc.
Por el contrario las falsas enseñanzas que hoy se dan como alimento “ sano” a la iglesia , producen en el cristiano que se enferme espiritualmente y esté incapacitado para vivir una vida útil y plena que es el propósito del Padre Celestial, perdiendo su efectividad en ser Luz y Sal de la tierra. El diablo logra este propósito usando a sus falsos maestros, apóstoles y profetas que distorsionando la verdad de Dios revelada en Su Palabra Santa y presentando medias verdades con mentiras incluidas, doctrinas de hombres y demonios como “nuevas revelaciones” del cielo envenenan a la iglesia día a día; o que simplemente usa a enseñadores confusos ;sin entrenamiento ni preparación bíblica que caen en errores doctrinales por mala interpretación de los textos por falta de estudios serios en su curriculum ministerial.
SIN LUGAR A DUDAS NECESITAMOS MAS MAESTROS BIEN ENTRENADOS Y LLENOS DEL ESPÍRITU SANTO; A MAS DISCIPULOS DISPUESTOS A APRENDER Y MAS RECURSOS BÍBLICOS EN NUESTRAS BIBLIOTECAS.
LA IMPORTANCIA QUE HOY TIENE LA ENSEÑANZA DE LA DOCTRINA CRISTOCÉNTRICA (SANA DOCTRINA) EN LA IGLESIA, ES QUE ESTA ES VITAL PARA LA SALUD ESPIRITUAL DE LOS CREYENTES, SU FORTALEZA ESPIRITUAL Y EL TENER EL PODER DE LOS CIELOS PARA REALIZAR EL CUMPLIMIENTO, DEL MANDATO DE LA GIGANTESCA LABOR DE ANUNCIAR EL EVANGELIO DE LA GRACIA A TODA CRIATURA EN ESTE TIEMPO FINAL ANTES DEL RETORNO DEL SEÑOR JESÚS POR SU IGLESIA.

Estudiemos con empeño la Palabra de Dios, no dejemos que más herejía entren a la iglesia por nuestra de falta de conocimiento de las Santas Escrituras. Vamos con ánimo a aprender la sana doctrina cada día.
Por Héctor Castellanos Berlioz.

jueves, 29 de diciembre de 2016

EL SECRETO DE LA PROSPERIDAD


VÍDEO SOBRE LA PROSPERIDAD.NADA QUE VER, CON EL EVANGELIO DE LA  PROSPERIDAD 
POR PASTOR: ARMANDO ALDUCIN



SOLO HAY UN EVANGELIO


EL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD SOLO HA ENRIQUECIDO A SUS EXPONENTES

MINISTERIOS INTEGRIDAD & SABIDURÍA














PERVERTIR EL EVANGELIO DE CRISTO

EL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD
GÁL. 1: 6-8 "ESTOY MARAVILLADO DE QUE TAN PRONTO OS HAYÁIS ALEJADO DEL QUE OS LLAMÓ POR LA GRACIA DE CRISTO, PARA SEGUIR UN EVANGELIO DIFERENTE. NO QUE HAYA OTRO, SINO QUE HAY ALGUNOS QUE OS PERTURBAN Y QUIEREN PERVERTIR EL EVANGELIO DE CRISTO. MAS SI AUN NOSOTROS, O UN ÁNGEL DEL CIELO, OS ANUNCIARE OTRO EVANGELIO, DIFERENTE DEL QUE OS HEMOS ANUNCIADO, SEA ANATEMA".

Las iglesias de nuestros días están siendo invadidas por UN EVANGELIO DIFERENTE que se ha popularizado con mucha rapidez. La verdad es que no existe otro evangelio, sino que hay algunos que han pervertido el evangelio de Jesucristo, explotando la superstición, la ambición y codicia humana con fines de lucro. Me refiero a aquellos que no han escatimado en hacer las más horrendas aseveraciones, con el propósito de enriquecerse y satisfacer sus ambiciones personales, como son los predicadores del evangelio de la prosperidad

La nueva filosofía que han introducido en las iglesias, explotando las emociones que son manipuladas con la superstición, la codicia y la autosugestión, ha permitido enriquecerse a algunos inescrupulosos que han traído tanto desprestigio al verdadero evangelio de Jesucristo. Mucho antes que el Movimiento de la Fe viniera a ser una fuerza dominante dentro de la iglesia Cristiana, Phineas Parkhurst Quimby, el padre del Nuevo Pensamiento, había popularizado la idea de que la enfermedad y el sufrimiento tenían su origen definitivo en la forma "incorrecta" de pensar. Los seguidores de Quimby sostenían que el hombre podía crear su propia realidad a través del poder del pensamiento positivo. Lo mismo afirman los de la "Ciencia cristiana" en su libro: Ciencia y Salud, que nos enfermamos porque estamos acostumbrados hacerlo y así lo hemos aprendido por tradición, pero que debemos aprender a pensar y creer que la enfermedad no es nuestra, para romper con ese ciclo. Los practicantes de la Metafísica, por mucho tiempo han enseñado a sus adherentes a visualizar la salud y la riqueza, y entonces a reafirmar los mismos conceptos con sus labios de tal manera que las imágenes intangibles, puedan ser transformadas en realidades tangibles. Uno de los exponentes del evangelio de la prosperidad, resume este concepto como: "menciónalo y reclámalo", que es el principio de la fe en la fe, y no la fe en Dios (Mr.11:22, 1Jn.5:14). Ellos realzan el poder de la palabra, dicen: "si Ud. habla palabras de temor, Ud. activa el lado negativo de la fuerza, si Ud. habla palabras de fe, activa el lado positivo". NOS QUIEREN HACER CREER QUE CADA COSA QUE SUCEDE ES UN RESULTADO DIRECTO DE NUESTRAS PALABRAS, DICEN: "LAS PALABRAS SON LOS RECIPIENTES ESPIRITUALES, Y LA FUERZA DE LA FE ES LIBERADA POR PALABRAS". Para darle más credibilidad a su mentira señalan que Dios, con el poder de Su palabra, hizo los cielos y la tierra; lo que significaría que el poder no está en Dios, sino en la palabra. La fórmula que ellos sostienen es: "Dilo, hazlo, recíbelo y cuéntalo". Es más, ellos saben que este es el principio que cultivan todos los brujos, hechiceros, clarividentes, mentalistas, adivinos, etc., pero justifican esta práctica diciendo: "Repitiendo frases una y otra vez, esta gente terminan creando algo, y realizan milagros, pero si el diablo puede hacer estas cosas ¿por qué no han de poder hacer mucho más los que pertenecen a la iglesia de Jesucristo? La respuesta es simple, los creyentes no podemos emplear estos métodos anticristianos, porque los caminos del Señor son muy diferentes a los de Satanás, y el Señor los condena enérgicamente en la Biblia. Es más, estos apóstatas quieren seducir a los incautos, con el mismo engaño que Satanás presentó a Eva, que seremos dioses, y sostienen en forma más audaz que "somos dioses". Enseñan que "Adán fue un exacto duplicado de Dios, y podía volar por el espacio e ir a la Luna". Resulta difícil imaginar que personas inteligentes y normales, puedan creer estas aberraciones, pero la Palabra del Señor dice en 2Ts.2: 1 "Dios les envía un poder engañoso, para que crean la mentira, a fin de que sean condenados todos los que no creyeron a la verdad". ALGUNO PODRÁ PREGUNTARSE ¿CUÁL ES LA VERDAD? A LO QUE RESPONDO CON LA AUTORIDAD QUE ME CONCEDE LA INFALIBLE PALABRA DEL SEÑOR, JESÚS DIJO: "YO SOY EL CAMINO Y LA VERDAD Y LA VIDA, NADIE VIENE AL PADRE SINO POR MÍ". La verdad es Cristo, pero no el falso Cristo que muchos están predicando en nuestros días, sino el Cristo que nos presenta la Biblia; de allí se origina la tremenda necesidad de no creer todo lo que se nos predica, aunque sean Pastores o Reverendos, porque DIOS NOS ADVIRTIÓ QUE EN LOS ÚLTIMOS TIEMPOS SE LEVANTARÍAN FALSOS PROFETAS Y FALSOS MAESTROS Y ENGAÑARÁN A MUCHOS. Es nuestra responsabilidad actuar con la sabiduría que tuvieron los cristianos de Berea, como dice en Hch.17: 11 "éstos eran más nobles que los que estaban en Tesalónica, pues recibieron la palabra con toda solicitud, escudriñando cada día las escrituras para ver si estas cosas eran así". Es un deber escudriñar la Biblia por nosotros mismos, para estar seguros que aquello que nos dicen, es conforme a las Sagradas Escrituras. La Biblia concluye con una advertencia muy solemne: "SI ALGUNO AÑADIERE A ESTAS COSAS, DIOS TRAERÁ SOBRE ÉL LAS PLAGAS QUE ESTÁN ESCRITAS EN ESTE LIBRO. Y SI ALGUNO QUITARE DE LAS PALABRAS DEL LIBRO DE ESTA PROFECÍA, DIOS QUITARÁ SU PARTE DEL LIBRO DE LA VIDA". También Dios nos dice en 2TM.4: 4 "VENDRÁ TIEMPO CUANDO NO SUFRIRÁN LA SANA DOCTRINA, SINO QUE TENIENDO COMEZÓN DE OÍR, SE AMONTONARÁN MAESTROS CONFORME A SUS PROPIAS CONCUPISCENCIAS, Y SE APARTARÁN DE LA VERDAD EL OÍDO Y SE VOLVERÁN A LAS FÁBULAS. DESECHA LAS FÁBULAS PROFANAS Y DE VIEJAS". Estos falsos maestros se han aprovechado de la desnutrición espiritual de muchos, para enseñar fábulas profanas, como si fuera revelación directa de Dios, dándoles la misma validez que a la revelación que Dios nos dejó en la Biblia (este pecado es muy similar al que comete el catolicismo con las tradiciones). Si esto fuera así, tendríamos que imprimir estas nuevas revelaciones y aumentar el volumen de la Biblia, pero sabemos por Ap.22:18 que sería un pecado que Dios no va a pasar por alto. Hoy dicen lo que quieren como si fuera palabra del Señor, y la congregación grita frenéticamente sin pensar ni razonar: Amén, Gloria a Dios. Uno de estos personajes dijo que el Señor lo trasladó al cielo, donde le fueron reveladas muchas cosas, y asegura que afortunadamente llevaba una cámara fotográfica; hoy está vendiendo la foto de Dios por 9 dólares, pero lo más increíble es que ha vendido una gran cantidad. Todos estos exponentes del evangelio de la prosperidad, han acumulado riquezas vaciando los bolsillos de quienes quieren oír esas insensateces. Para justificar sus riquezas y explotar la ambición y codicia humana, dicen "si Jesús hubiera sido pobre, yo también quisiera ser pobre, si Jesús hubiera dormido debajo de un puente, también yo lo haría, pero como Jesús fue muy rico, yo también debo ser muy rico". Afirman: "no tan sólo la preocupación es pecado, sino que ser pobre es pecado, porque la promesa de Dios es la prosperidad". Dicen que el Señor fue tan rico, que necesitaba de un tesorero para administrar sus riquezas. ¡Qué insulto al Señor y a nuestra inteligencia! Pero ¿en qué se basa el éxito de esta herejía que predican? Solamente en la superstición, la ignorancia de la Palabra del Señor y en la codicia humana. Distorsionando lo que dice en Mr.10: 30 ellos predican: "Dé una casa y recibirá cien casas, ofrende para el Señor un auto, y recibirá todos los automóviles que va a usar durante su vida, ofrende 10 mil y el Señor le dará 100 mil". Estos tuercen el principio bíblico de dar porque amamos, por el de dar para recibir. BIEN SABEMOS QUE EL MISMO SEÑOR DIJO EN MT.6: 19 "NO OS HAGÁIS TESOROS EN LA TIERRA, DONDE LA POLILLA Y EL ORÍN CORROMPEN Y DONDE LADRONES MINAN Y HURTAN, SINO HACEOS TESOROS EN EL CIELO". SI FUERA VERDAD LO QUE LOS EXPONENTES DEL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD PREDICAN ¿POR QUÉ EN VEZ DE PEDIR DINERO Y EXPRIMIR AL PUEBLO DEL SEÑOR, NO REGALAN SUS PROPIEDADES PARA RECIBIR AL CIENTO POR UNO? En cambio rebajan al Dios, dueño del cielo y de la tierra a un mísero nivel de mendigo, porque dicen pedir el dinero para Dios, no para ellos. Esto es porque saben muy bien que no funciona así. Pero explotan la ambición humana para lucro personal, una vez que les han sacado todo el dinero de los bolsillos les dicen: "Si tiene un TV. en blanco y negro, regálelo para el Señor y él le dará uno nuevo a colores, pero dé lo mejor para el Señor, y él se lo devolverá con un interés de ciento por uno". Con esta filosofía, unos cuantos inescrupulosos se han enriquecido. Pero el evangelio de la prosperidad no apela únicamente a la codicia, sino también a la superstición, que en los países de origen católico es muy sensible. En el catolicismo estaban acostumbrados a pagar "mandas" para conseguir un favor de Dios; hoy son muchos los que ofrendan con este mismo propósito, para comprar un favor de Dios o simplemente para que "les vaya bien". Usan la ofrenda como un amuleto de la buena suerte, porque eso es lo que esa clase de líderes les enseñan. Si ofrendan les irá bien, pero si no lo hacen serán castigados por Dios, y los amedrentan con historias que inventan. Recuerdo haber escuchado una de ellas, decía el predicador: "Un hermano no quiso pagar el diezmo, y cuando estaba en su casa sentado en su sillón, comenzó a quemarse la casa, cuando vio las llamas, quiso correr a apagar el incendio, pero entonces escuchó una voz que le decía, esto te sucedió por no pagar el diezmo, le has robado a Dios; no pudo levantarse y se quemó toda su casa". Debido a la ignorancia bíblica que han sometido al pueblo de Dios, es que pueden explotar la superstición y manipular a la congregación a su antojo. Son muchos los que creen que si ofrendan generosamente les irá bien, pero si no lo hacen, se exponen a que les acontezca alguna desgracia. CREEN COMO SIMÓN EL MAGO, QUE PUEDEN COMPRAR EL FAVOR DE DIOS. Cuan pobre y minúsculo es el concepto que tienen de Dios; el Dios de la Biblia no es un limosnero, es el Creador y dueño de todo el universo. Él no necesita absolutamente nada nuestro, simplemente nos concede el privilegio de dar algo de lo que él en Su misericordia nos ha bendecido; y daremos libremente, por amor, lo que propongamos en nuestro corazón (2Cor.9: 7) El verdadero creyente ofrenda sin esperar una retribución aquí en la tierra, sino por el gozo que significa poder participar en los negocios de nuestro Padre Celestial. Todas estas doctrinas espurias deben revestirlas con un matiz bíblico para poder engañar al pueblo de Dios. Así fue como Satanás pretendió engañar al mismo Señor Jesús, utilizando algunos pasajes aisladamente. El pasaje favorito de estos engañadores es Mr. 11: 24 "Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá". Si leyéramos únicamente el versículo 24, podría parecer razonable lo que afirman estos embaucadores. Pero el mismo versículo en cuestión comienza "Por tanto", esto liga indivisiblemente con lo que antes ha expuesto. Y la enseñanza del Señor sobre la oración de fe, comienza en el verso 22, que dice: "Respondiendo Jesús, les dijo: Tened fe en Dios". Este es el principio y el fin de una oración de fe, fe en Dios, no fe en nuestra propia fe. El Dios de la Biblia no es como el genio de la lámpara de Aladino que está a nuestro servicio; él es el Señor y nosotros sus siervos. En 1Jn.5:14 dice: "Y esta es la confianza que tenemos en él, que si pedimos alguna cosa CONFORME A SU VOLUNTAD, él nos oye en cualquiera cosa que pidamos". Ahora, para engañar a los que no leen ni escudriñan sus Biblias, les citan una parte del versículo 30 de Mr.10 para convencerlos de que debemos tener las riquezas ahora en este tiempo. Pero analicemos el pasaje completo y la verdad saltará sola ante nuestros ojos. En primer lugar, la exhortación del Señor comienza en el vr.23 donde dice: "¡Cuán difícilmente entrarán en el reino de Dios los que tienen riquezas!". Sería una abierta contradicción si comenzará el anuncio diciendo que las riquezas son un gran obstáculo para entrar en el cielo, y luego prometiera darnos riquezas aquí en la tierra. No tendría sentido que nos diera un lastre tan pesado, para elevarnos a las mansiones celestiales. Él claramente ha enseñado que no nos hagamos tesoros aquí en la tierra (Mt.6: 19) ¿CÓMO ENTONCES NOS HABRÍA DE PROMETER UNA FÓRMULA MÁGICA PARA ENRIQUECERNOS AQUÍ EN LA TIERRA, COMO SOSTIENEN LOS EXPONENTES DEL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD? No tiene sentido. Si él ha dicho en Mr.10: 23 que las riquezas presentan un impedimento, no podría estar ofreciendo hacernos ricos aquí en la tierra, sería un contrasentido. ¿Cuál es entonces la correcta interpretación de Mr.10: 30 para no entrar en conflicto con el resto de la Biblia? Leamos los versos 29 y 30 "De cierto os digo que no hay ninguno que haya dejado casa, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o mujer, o hijos, o tierras, POR CAUSA DE MI Y DEL EVANGELIO, QUE NO RECIBA CIEN VECES MÁS AHORA EN ESTE TIEMPO; CASAS, HERMANOS, HERMANAS, MADRES, HIJOS, Y TIERRAS, CON PERSECUCIONES; Y EN EL SIGLO VENIDERO LA VIDA ETERNA". En primer lugar vale señalar que la promesa no es para todos, sino para los que hayan sufrido pérdidas por causa del evangelio y tenido persecuciones. En segundo lugar, resulta muy evidente que la promesa no consiste en recibir materialmente cien veces más de lo que hayamos perdido, porque esto nos llevaría a un absurdo como suponer que el que perdió a su esposa por causa del evangelio, habría de recibir cien esposas ahora en este tiempo, porque eso es lo que dice literalmente el vr.29. La explicación más lógica de esta promesa del Señor, es que aquellos que han sufrido pérdidas de seres queridos, por causa del evangelio y tenido que enfrentar persecuciones; en las nuevas tierras que emigren encontrarán en la familia de Dios, la iglesia, donde disfrutarán de ese amor fraternal que vendrá a suplir con creces el amor familiar que perdió. Su nueva familia será una familia muy numerosa, la iglesia. En ella hallará también muchas casas de hermanos que se abrirán para recibirlo, pero no significa que le regalarán con títulos de propiedad cien casas, sino que todas ellas estarán disponibles para recibirlo con el amor de una madre, de un padre, de un hermano. Lo que el Señor nos dice es que en este tiempo tendremos esto con persecuciones, pero en el venidero con gloria (Mt.19: 28-30). Sería una contradicción absurda suponer que el Señor nos promete riquezas ahora en este tiempo, CUANDO ÉL NOS HA DICHO QUE EN EL MUNDO SUFRIREMOS PERSECUCIÓN, SEREMOS ABORRECIDOS (LC.21:17), EL QUE QUIERA SEGUIRLE TOME SU CRUZ CADA DÍA (LC.9: 23), NO TOMÉIS NADA PARA EL CAMINO (LC.10: 4) NO HAGÁIS TESOROS EN LA TIERRA (Mt.6:19) etc.

SI LA FILOSOFÍA DEL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD FUERA VERDAD, EL APÓSTOL PABLO DEBIÓ SER EL MÁS ACAUDALADO DE SU ÉPOCA, PORQUE ÉL SE DESPOJÓ DE TODOS SUS BIENES TERRENALES PARA SEGUIR AL SEÑOR, ABANDONÓ SU PROMINENTE CARRERA EN EL EJÉRCITO ROMANO, SU POSICIÓN EN LA SOCIEDAD JUDÍA COMO FARISEO, ERA MIEMBRO DEL SANEDRÍN, SEGURAMENTE QUE DEBIDO A SU POSICIÓN SOCIAL TENDRÍA UNA HERMOSA CASA, PERO A TODO ESO RENUNCIÓ POR AMOR A CRISTO. Y ¿QUÉ FUE LO QUE RECIBIÓ EN RETRIBUCIÓN? POBREZA, CÁRCELES, ENFERMEDADES, ABANDONO. ¿SERÍA PORQUE EL APÓSTOL NO TUVO SUFICIENTE FE PARA BENEFICIARSE CON EL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD? ¿O PORQUE ESTE ES EL "OTRO EVANGELIO DIFERENTE" DEL CUAL ÉL MISMO NOS ADVIRTIÓ EN GÁL.1: 6, EL FALSO?


SAQUE UD. SUS PROPIAS CONCLUSIONES.

EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD, FALSO EVANGELIO


ERRORES DEL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD

EL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD, EN EL FONDO, SE TRANSFORMA EN UN EVANGELIO FALSO, DEBIDO A SU DEFECTUOSA VISIÓN DE LA RELACIÓN ENTRE DIOS Y EL HOMBRE. EN POCAS PALABRAS, SI EL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD ES VERDAD, LA GRACIA ES ALGO OBSOLETO, DIOS ES IRRELEVANTE, Y EL HOMBRE ES LA MEDIDA DE TODAS LAS COSAS.

Hace más de un siglo, hablando a la que entonces era la congregación más grande de toda la Cristiandad, Charles Spurgeon dijo: “Creo que es anticristiano e impío, para cualquier cristiano, vivir con el objetivo de acumular riquezas. Usted dirá, '¿No se supone que debemos esforzarnos todo lo que podamos por conseguir tanto dinero como podamos?' Pudieras hacerlo. No me cabe duda que, al hacerlo, usted puede servir a la causa de Dios.

Pero lo que dije es que vivir con el objetivo de acumular riquezas, es anticristiano”.‪ Al pasar de los años, el mensaje que se predica en algunas de las iglesias más grandes del mundo ha cambiado. De hecho, hay un nuevo evangelio que se predica hoy día.
A este mensaje se le han adscrito muchos nombres, tales como evangelio de “decláralo y recíbelo”, el evangelio de “písalo y arrebátalo”, el evangelio de “la salud y las riquezas”, el “evangelio de la prosperidad” y “la teología de la confesión positiva”. ‪Sin importar cuál sea el nombre utilizado, la esencia del mensaje es la misma. En pocas palabras, este “evangelio de la prosperidad” enseña que Dios quiere que los creyentes sean sanos físicamente, ricos materialmente, y felices personalmente. Así lo dice Robert Tilton: “Creo que es la voluntad de Dios que todos prosperen, porque así lo veo en la Palabra, y no porque lo haya visto funcionar poderosamente en otra persona.
No pongo mis ojos en los hombres, sino en Dios que me da el poder para hacer riquezas”. Los maestros del evangelio de la prosperidad animan a sus seguidores a orar –incluso a demandar a Dios– un florecimiento material. ‪Cinco errores teológicos ‪Russell Woodbridge y yo escribimos un libro titulado “Health, Wealth and Happinness” (“Salud, riqueza y felicidad: ¿Ha eclipsado el evangelio de la prosperidad el evangelio de Cristo?”) con el objetivo de examinar las afirmaciones de los defensores del evangelio de la prosperidad. Aunque el libro abarca demasiado como para resumirlo aquí, en este artículo voy a tratar de revisar cinco doctrinas que se cubren en el mismo, doctrinas donde el evangelio de la prosperidad defiende el error. Mientras discernimos estos errores con respecto a doctrinas claves, espero que podamos ver claramente los peligros de este falso evangelio. ‪1. El pacto de Abraham es un medio para el derecho material. ‪El pacto de Abraham (Génesis 12, 15, 17, 22) es una de las bases teológicas del evangelio de la prosperidad. Es bueno que los teólogos de la prosperidad reconozcan que gran parte de las Escrituras son un registro del cumplimiento del pacto con Abraham, pero es malo que no mantengan una visión ortodoxa de este pacto. Ven de forma incorrecta el inicio del pacto, y, más significativamente, ven incorrectamente la aplicación de dicho pacto. ‪En su libro “Spreading the Flame” (Esparciendo la llama), Edward Pousson expuso la visión de la prosperidad sobre la aplicación del pacto Abrahámico: “Los cristianos son los hijos espirituales de Abraham, y los herederos de las bendiciones de la fe… Esta herencia de Abraham se desarrolla principalmente en términos de derechos materiales”.
En otras palabras, el evangelio de la prosperidad enseña que el propósito principal del pacto con Abraham era su bendición material por parte de Dios. Como ahora los creyentes son hijos espirituales de Abraham, hemos heredado esas bendiciones financieras. Como Kenneth Copeland escribió en su libro de 1974 “The Laws of Prosperity” (Las leyes de la prosperidad): ”Como el pacto de Dios ha sido establecido, y la prosperidad es una provisión de este pacto, ¡usted tiene que tomar conciencia de que la prosperidad ahora le pertenece!”. Para apoyar esta afirmación, los maestros de la prosperidad apelan a Gálatas 3:14, que se refiere a “la bendición de Abraham que viene sobre los gentiles en Cristo Jesús”. ES INTERESANTE, SIN EMBARGO, QUE EN SUS APELACIONES A GÁLATAS 3:14 ESTOS MAESTROS IGNORAN LA SEGUNDA MITAD DEL VERSÍCULO: “PARA QUE RECIBIÉRAMOS LA PROMESA DEL ESPÍRITU MEDIANTE LA FE”. Claramente, PABLO ESTÁ RECORDANDO A LOS GÁLATAS LAS BENDICIONES ESPIRITUALES DE LA SALVACIÓN, NO LA BENDICIÓN MATERIAL DE LAS RIQUEZAS. ‪
2. La expiación de Jesús se extiende hasta el “pecado” de la pobreza material. ‪En su artículo en Biblioteca Sacra “A Theological Evaluation of the Prosperity Gospel” (Una valoración teológica del evangelio de la prosperidad), el teólogo Ken Sarles observa cómo el evangelio de la prosperidad reclama que “tanto la salud física como la prosperidad financiera, han sido provistas en la expiación”. Esta observación parece ser acertada a la luz de la afirmación de Copeland de que “el principio básico de la vida cristiana es saber que Dios ha puesto nuestro pecado, malestar, enfermedad, tristeza, angustia y pobreza sobre Jesús en el Calvario”. Este mal entendimiento del alcance de la expiación surge de dos errores que cometen los defensores del evangelio de la prosperidad. En primer lugar, muchos de los que defienden la teología de la prosperidad tienen un concepto erróneo fundamental sobre la vida de Jesús. Por ejemplo, el profesor John Avanzini proclamó en un programa de TBN que Jesús tenía “una casa bonita”, “una casa grande,” “Jesús estaba manejando grandes cantidades de dinero”, e incluso que “llevaba ropa de diseñador”. Es fácil ver cómo esa visión deformada de la vida de Cristo podría llevar a un error igualmente deformado sobre la muerte de Cristo. ‪Un segundo error que conduce a una visión errónea de la expiación es malinterpretar 2 CORINTIOS 8:9, QUE DICE: “PORQUE CONOCEN LA GRACIA DE NUESTRO SEÑOR JESUCRISTO, QUE SIENDO RICO, SIN EMBARGO POR AMOR A USTEDES SE HIZO POBRE, PARA QUE POR MEDIO DE SU POBREZA USTEDES LLEGARAN A SER RICOS”. Aunque una lectura superficial de este versículo podría llevarnos a creer que Pablo estaba enseñando sobre un aumento en la riqueza material, la lectura en su contexto revela que, de hecho, estaba enseñando el principio opuesto. En realidad, Pablo estaba enseñando a los corintios que ya que Cristo realizó tanto por ellos a través de la expiación, deberían vaciarse de sus riquezas en el servicio del Salvador. Esta es la razón de que, solo cinco versículos más tarde, Pablo inste a los corintios a dar sus riquezas por los hermanos necesitados, escribiendo: “En el momento actual la abundancia de ustedes suple la necesidad de ellos”, 2 Corintios 8:14.
 3. Los cristianos dan para ganar una compensación material de Dios. ‪Una de las características más llamativas de los teólogos de la prosperidad es su aparente fijación con el dar. Se nos insta a dar generosamente y se nos confronta con declaraciones piadosas como: “La verdadera prosperidad es la capacidad de utilizar el poder de Dios para satisfacer las necesidades de la humanidad en cualquier ámbito de la vida”, y “Hemos sido llamados para financiar el evangelio al mundo”. Mientras que tales declaraciones pueden parecer loables, este énfasis en el ofrendar se basa en motivos que son todo menos filantrópico. La fuerza que impulsa esta enseñanza sobre el dar es a lo que el maestro de la prosperidad Robert Tilton se refirió como “Ley de la compensación”. De acuerdo con esta ley, supuestamente basada en Marcos 10:30, los cristianos deben dar generosamente a los demás, porque cuando lo hacen, Dios les devuelve más a cambio. Esto, a su vez, conduce a un ciclo de cada vez mayor prosperidad, que nunca se detiene. Como Gloria Copeland expuso en su libró de 2012 “God’s Will is Prosperity” (La voluntad de Dios es la prosperidad): “Si da 10 dólares recibirá 1.000, si da 1.000 recibirá 100.000 ... En resumen, Marcos 10:30 es un muy buen negocio”. Es evidente, por tanto, que la doctrina del dar del evangelio de la prosperidad, está construida sobre motivos deficientes. Mientras que Jesús enseñó a sus discípulos a “dar sin esperar nada a cambio” (Lucas 6:35) los teólogos de la prosperidad enseñan a sus discípulos a dar porque conseguirán un gran retorno de inversión.
 ‪4. La fe es una fuerza espiritual autogenerada que conduce a la prosperidad. ‪Mientras que el cristianismo ortodoxo entiende LA FE COMO LA CONFIANZA EN LA PERSONA DE JESUCRISTO, los maestros de la prosperidad defienden algo bastante diferente. “La fe es una fuerza espiritual, una energía espiritual, un poder espiritual. Es esta fuerza de la fe la que hace que las leyes del mundo espiritual funcionen”, escribe Copeland. “Hay ciertas leyes que gobiernan la prosperidad revelada en la Palabra de Dios. La fe hace que funcionen”. Obviamente, este es un entendimiento erróneo de la fe. Quizás incluso herético. ‪Según la teología de la prosperidad, la fe no es un acto de la voluntad dado por Dios y centrado en Dios. Más bien, es una fuerza espiritual forjada en lo humano y dirigida a Dios. Desde luego, cualquier teología que vea la fe principalmente como un medio para obtener beneficios materiales en lugar de justificación ante Dios debe ser, en el mejor de los casos, considerada inadecuada.
 ‪5. LA ORACIÓN ES UNA HERRAMIENTA PARA FORZAR A DIOS A QUE CONCEDA PROSPERIDAD. Los predicadores del evangelio de la prosperidad hacen notar a menudo que “no tenemos porque no pedimos” (Santiago 4:2). Nos animan a orar por el éxito personal en todas las áreas de la vida. Como escribe Creflo Dollar, “Cuando oramos, creyendo que ya hemos recibido lo que estamos orando, Dios no tiene más remedio que hacer que nuestras oraciones se cumplan… Es una clave para conseguir resultados como cristiano”. ‪Las oraciones pidiendo bendición personal no son inherentemente malas, pero el excesivo énfasis que hace el evangelio de la prosperidad sobre el hombre convierten a la oración en una herramienta que los creyentes pueden utilizar para forzar a Dios a concederles sus deseos. En la teología de la prosperidad, es el hombre (y no Dios) el que se convierte en el punto central de la oración. CURIOSAMENTE, LOS PREDICADORES DE LA PROSPERIDAD A MENUDO IGNORAN LA SEGUNDA MITAD DE LA ENSEÑANZA DE SANTIAGO SOBRE LA ORACIÓN: “PIDEN Y NO RECIBEN, PORQUE PIDEN CON MALOS PROPÓSITOS, PARA GASTARLO EN SUS PLACERES” (SANTIAGO 4:3).
Dios no responde las peticiones egoístas que no honran su Nombre. Ciertamente, todas nuestras peticiones deben ser conocidas delante de Dios (Filipenses 4:6), pero el evangelio de la prosperidad se centra demasiado en los deseos del hombre, que puede llevar a la gente a hacer oraciones egoístas y superficiales que no traen gloria a Dios. Además, cuando esto se combina con la doctrina de la fe de la prosperidad, esta enseñanza puede llevar a la gente a intentar manipular a Dios para conseguir lo que quieren, lo cual es una tarea inútil. ESTO ESTÁ MUY LEJOS DE ORAR DICIENDO: “HÁGASE TU VOLUNTAD”. ‪FALSO EVANGELIO A LA LUZ DE LAS ESCRITURAS, EL EVANGELIO DE LA PROSPERIDAD ES FUNDAMENTALMENTE ERRÓNEO. En el fondo, se trata de un evangelio falso debido a su defectuosa visión de la relación entre Dios y el hombre. En pocas palabras, si el evangelio de la prosperidad es verdad, la gracia es algo obsoleto, Dios es irrelevante, y el hombre es la medida de todas las cosas. Ya sea que estemos hablando del pacto con Abraham, de la expiación, del dar, de la fe, o de la oración, los maestros de la prosperidad convierten la relación entre Dios y el hombre en una transacción de dar y recibir. Como James Goff señaló en un artículo de 1990 para Christianity Today, DIOS SE VE “REDUCIDO A UNA ESPECIE DE 'MAYORDOMO CÓSMICO' QUE ATIENDE LAS NECESIDADES Y DESEOS DE SU CREACIÓN”. Este es un punto de vista completamente inadecuado y antibíblico de la relación entre Dios y el hombre.
Publicado originalmente para The Gospel Coalition. Traducido por Manuel Bento. David W. Jones es profesor de ética cristiana, Decano asociado de administración del programa de posgrado, y director del programa Th.M. en el Southeastern Baptist Theological Seminary en Wake Forest, Carolina del Norte. Es co-autor de varios libros, incluyendo “Salud, riqueza y felicidad: ¿ha eclipsado el evangelio de la prosperidad al Evangelio de Cristo? (Kregel, 2010).


miércoles, 28 de diciembre de 2016

CARTA PUBLICA A MI AMADO DIOS JEHOVA

DECLARO, QUE NO ME AVERGUENZO NI DE TI OH AMADO DIOS, NI DE TU HIJO JESUS, NI DEL GLORIOSO ESPIRITU SANTO, ASI COMO TAMPOCO DE TU PALABRA, NI DEL EVANGELIO.
QUIERO DECLALARAR AL MUNDO QUE YO. FRANKLIN RAFAEL GONZALEZ QUINTERO, TE AMA Y LO QUE MAS ANHELA EN ESTA VIDA ES SERVIRTE.  
ASI SERA. AMEN.    GLORIA.    A DIOS.

Quiero ante que todo reconocer que soy un pecador, que he cometido viles y atroces errores, que me han alejado de DIOS, le he pedido perdón y he recibido a Cristo Jesús, como los recibieron todos aquellos a quienes les dio la potestad de ser hechos hijos, de DIOS.

Te escribo padre amado, porque lo que más anhelo, es que tu tomes el control total de mi vida, sin restricción de ningún tipo, abriendo mi corazón y todas las áreas de mi vida, para que a través del Glorioso espíritu santo, puedas transformarme, de tal manera que yo solo viva, el resto de mis días para hacer tu preciosa y bendita voluntad, y que el propósito para el cual me trajiste a este mundo se cumpla en mi vida.  

Deseo servir en tu obra y ayudar a muchos necesitados, que como yo han vivido en escasez, hambre y pobreza. Declaro que solo deseo hacer la voluntad de mi padre ya que mi vida le pertenece, y así tiene que ser, motivado a que por mis propios medios, solo viviría de pecado en pecado y de error en error. Pido perdón al PADRE, AL HIJO, Y AL ESPÍRITU SANTO, POR TODOS MIS PECADOS Y POR MIS ERRORES, DE LOS CUALES UNO DE ELLOS HA AFECTADO MUY NEGATIVAMENTE A MIS HIJOS.
Al recibir a tu hijo, recibo una vida nueva, las cosas viejas pasaron todas son hechas nuevas, por lo tanto me DECLARO HIJO DE DIOS, LIBRE DE MALDICIONES EN MI VIDA Y EN LA VIDA DE MIS HIJO, LIBRE DE CONCIENCIA PUES HE SIDO PERDONADO Y LIBERADO, SOY UN HIJO DE DIOS PROSPERO.Pido, inteligencia y sabiduría, para serle fiel y obediente a JEHOVA, EL ÚNICO DIOS VIVIENTE Y EXISTENTE. ME DECLARO BENDECIDO AL LADO DE MIS DOS HIJOS Y MI CASA, PORQUE MI CASA Y YO SERVIREMOS A JEHOVA. BENDITA ES MI FAMILIA. AMEN. GLORIA A DIOS. CARTA ABIERTA AL MUNDO DECLARANDO MI AMOR POR EL DIOS TRINO Y EL DESEO DE HACER SU VOLUNTAD.

Pidiéndoles a DIOS, a través de CRISTO y EL ESPÍRITU SANTO; que engrandezcan mi amor, mi fe, mi confianza, mi esperanza y paciencia en la trinidad, y ratificando la promesa a JEHOVA, de servir en su obra, según lo que el tenga dispuesto para mi. Por: Franklin R. González Q.

¿TIENE QUE SER BAUTIZADO PARA SER LLENO CON EL ESPÍRITU SANTO?


No. Ud. no tiene que estar bautizado en agua para ser lleno con el Espíritu Santo.

 Para probar esto, todo lo que tenemos que hacer es mirar las Escrituras donde se usa la frase “lleno con el Espíritu Santo”:

Lucas 1:15: “porque será grande delante de Dios. No beberá vino ni sidra, y será lleno del Espíritu Santo, aun desde el vientre de su madre.”
Lucas 1:41: “Y aconteció que cuando oyó Elisabeth la salutación de María, la criatura saltó en su vientre; y Elisabeth fue llena del Espíritu Santo,”
Lucas 1:67: “Y Zacarías su padre fue lleno del Espíritu Santo, y profetizó, diciendo:”
Hechos 2:4: “Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen.”
Hechos 4:8: “Entonces Pedro, lleno del Espíritu Santo, les dijo: Gobernantes del pueblo, y ancianos de Israel:”

Hechos 4:31: “Cuando hubieron orado, el lugar en que estaban congregados tembló; y todos fueron llenos del Espíritu Santo, y hablaban con denuedo la palabra de Dios.”
Hechos 9:17: “Fue entonces Ananías y entró en la casa, y poniendo sobre él las manos, dijo: Hermano Saulo, el Señor Jesús, que se te apareció en el camino por donde venías, me ha enviado para que recibas la vista y seas lleno del Espíritu Santo.”
Hechos 13:9: “Entonces Saulo, que también es Pablo, lleno del Espíritu Santo, fijando en él los ojos,”
Hechos 13:52: “Y los discípulos estaban llenos de gozo y del Espíritu Santo.”Efesios 5:18: “No os embriaguéis con vino, en lo cual hay disolución; antes bien sed llenos del Espíritu,”
Podemos ver entonces, que Jesús fue lleno del Espíritu Santo mientras aun se encontraba en el vientre de Su madre. Claro está que Él no había sido bautizado todavía. En Lucas 1:41, vemos que Elisabet también fue llena del Espíritu Santo y tampoco había sido bautizada. Lo mismo es verdad para Zacarías, en Lucas 1:67. En Hechos 2:4 las personas fueran llenas con el Espíritu y no fueron bautizadas sino después:
“Pedro les dijo: Arrepentíos, y bautícese cada uno de vosotros en el nombre de Jesucristo para perdón de los pecados; y recibiréis el don del Espíritu Santo.” (Hch 2:38).
Una de las evidencias de ser lleno con el Espíritu Santo es hablar en lenguas; aunque el hablar en lenguas no es un resultado necesario de ser lleno con el Espíritu Santo. Cuando leemos otro grupo de versículos en Hechos, vemos algo muy interesante:
“Mientras aún hablaba Pedro estas palabras, el Espíritu Santo cayó sobre todos los que oían el discurso. 45Y los fieles de la circuncisión que habían venido con Pedro se quedaron atónitos de que también sobre los gentiles se derramase el don del Espíritu Santo. 46 Porque los oían que hablaban en lenguas, y que magnificaban a Dios. 47 Entonces respondió Pedro: ¿Puede acaso alguno impedir el agua, para que no sean bautizados estos que han recibido el Espíritu Santo también como nosotros? 48 Y mandó bautizarles en el nombre del Señor Jesús. Entonces le rogaron que se quedase por algunos días.” (Hch 10:44-48).

Es obvio desde el texto, que los gentiles ya habían recibido el don del Espíritu Santo y estaban hablando en lenguas, antes de ser bautizados en agua. Por lo tanto, la respuesta es clara: No es necesario estar bautizado para poder ser lleno con el Espíritu Santo.

ORACION PARA ACEPTAR A CRISTO COMO TU UNICO Y SUFICIENTE SALVADOR PERSONAL


A TRAVÉS DE ESTE VÍDEO, PUEDES POR MEDIO DE ESTA ORACIÓN, RECIBIR A JESUS COMO TU SEÑOR Y SALVADOR.
TE INVITO A ACEPTAR A JE SUS SOLO TIENES QUE REPETIR ESTA ORACIÓN, ABRIENDO TU CORAZÓN A EL Y CON FE, HAZLA Y VERAS QUE TU VIDA COMO LA MÍA CAMBIARAN.





DIOS NOS INDICARA SU VOLUNTAD



LA VOLUNTAD DE DIOS

VÍDEO POR: CHARLES STANLEY
PROGRAMA EN CONTACTO

LIBRO DE LOS SALMOS. SALMO 16 VERSÍCULO 11.
11 ME MOSTRARÁS LA SENDA DE LA VIDA; EN TU PRESENCIA HAY PLENITUD DE GOZO; DELICIAS A TU DIESTRA PARA SIEMPRE.

EL REINO DE DIOS


¿CÓMO ALCANZAR EL REINO DE DIOS?, ¿Y CÓMO BUSCAMOS LA JUSTICIA DE DIOS?
Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33

Esta es una de las promesas de Dios que más escuchamos en predicaciones y ciertamente es muy alentadora y abarcadora. También me parece que aquí está la clave para tener una vida victoriosa en Cristo y ser totalmente libre de preocupaciones. Pero ¿Cuántos de nosotros entendemos realmente lo que significa esto? ¿Qué nos quiso decir Jesús con esto? ¿Cómo lo aplicamos? Para entender Mateo 6:33 debemos estudiar también su contexto. 

En Mateo 6:25-32 podemos encontrar una introducción a esta promesa del Señor cuando Jesús nos exhorta a no preocuparnos por las necesidades materiales como comida, vivienda y otras necesidades básicas. La forma en que describe estas necesidades y preocupaciones me hace entender que Jesús incluye toda necesidad posible que el ser humano pueda tener y no sólo las materiales. Jesús nos conforta diciéndonos que Él sabe de qué cosas tenemos necesidad antes de que se lo digamos, e incluso antes de que nosotros mismos nos demos cuenta pues, Él es omnisciente. Cómo no nos va a suplir a nosotros todas las necesidades mucho más abundantemente que al resto de la creación? Y si sabemos que Dios mismo nos creó a nosotros y al universo entero sabemos también que Él es más que suficiente para suplir todo lo que necesitamos. En Romanos 8:32 nos confirma que Él nos dará todas las cosas cuando el apóstol Pablo dice: "El que no escatimó ni a su propio Hijo, sino que lo entregó por todos nosotros, ¿cómo no nos dará también con El todas las cosas?". Así que si nuestro Padre Celestial nos dio lo más grande, importante y valioso en el universo, ¿por qué escatimaría en darnos también otras cosas? Somos tan importantes para Dios que dio la vida de su hijo amado Jesucristo para que nosotros tengamos vida abundante y nada nos falte.
También podemos entender que Jesús nos invita a que dependamos totalmente de El para todas las cosas y pongamos toda la confianza en El sabiendo que Él siempre quiere y siempre puede obrar a nuestro favor. En el Salmo 37 encontramos una promesa que afirma a Mateo 6:33 (Salmo 37:5 "ENCOMIENDA A JEHOVÁ TU CAMINO, Y CONFÍA EN ÉL; Y ÉL HARÁ". Y en el verso 34 nos dice "ESPERA EN JEHOVÁ, Y GUARDA SU CAMINO, Y ÉL TE EXALTARÁ PARA HEREDAR LA TIERRA". Claramente vemos que Dios nos exige total dependencia y confianza en EL, esta es la única forma en que los que servimos a Dios podemos tener victoria y tener una vida exitosa tanto en los asuntos espirituales como en los seculares. De esta forma podemos vivir libres de toda preocupación en fe sabiendo que el Señor proveerá todas las cosas.
En Mateo 6:33 Jesús nos muestra cómo alcanzar esta promesa de bendición indicándonos que debemos cumplir con dos condiciones para que veamos la realización de "todas estas cosas os serán añadidas". Estas son:
BUSCAD PRIMERAMENTE EL REINO DE DIOS Y SEGUNDO Y BUSCAR SU JUSTICIA.
Ahora veremos individualmente que significa cada una de estas condiciones y cómo lograrlas. Primero nos dice que busquemos lo que requiere un esfuerzo de parte nuestra y sabemos que todo aquel que busca encuentra, como dice en MATEO 7:8 "PORQUE TODO AQUEL QUE PIDE, RECIBE; Y EL QUE BUSCA, HALLA; Y AL QUE LLAMA, SE LE ABRIRÁ." Si le pides al Señor que te muestre su reino y su justicia y de verdad lo estás buscando ÉL lo traerá a ti.
EL REINO DE DIOS
No aparece referencia directa al "Reino de Dios" en el Antiguo Testamento y este término es mencionado por primera vez en los 4 evangelios del Nuevo Testamento. Al comparar el evangelio según San Mateo con los otros 3 evangelios podemos ver que Reino de Dios y Reino de los Cielos son sólo sinónimo de lo mismo. Es claro que el Reino de los Cielos es lo mismo que el Reino de Dios ya que cielos implica divinidad y sólo Dios es divino. El hecho de que el término Reino de Dios sea introducido en los evangelios nos indica que el mismo viene a nosotros por causa del evangelio de Jesucristo y por eso no se había mencionado en el Antiguo Testamento ya que el Mesías aún no había venido a morar entre los hombres. Al tratar de buscar una definición a lo que es el Reino de Dios descubrí que es tan abarcador que me ha sido muy difícil de definir y que muchas partes de este van más allá de nuestra comprensión humana. No se puede esperar menos de algo tan grande y maravilloso como el Reino de Dios. Aun así la Palabra de Dios nos ha dado suficiente información para poder saber las implicaciones del Reino de Dios en nuestras vidas y cómo podemos sacar provecho de él y participar en los asuntos del reino.
Primero sabemos que todo reino tiene un rey. Jesucristo el Rey de reyes (Apocalipsis 17:14) y nosotros seremos sus príncipes ya que él dice que reinaremos juntamente con El. Vemos esto cuando en Lucas 17 los fariseos le preguntan a Jesús cuándo llegaría el Reino de Dios y Jesús les dice que no será un lugar aquí o allá sino que el Reino de Dios está entre ellos. (Jesús estaba entre ellos) dando a entender que es un reino espiritual y no uno terrenal y que sólo ÉL lo trae a ellos. También podemos ver un vínculo fuerte entre el Reino de Dios y su Justicia en el Salmo 97:2 cuando nos habla de cómo la justicia es cimiento de su trono indicando que su reino está basado en la justicia. EN ROMANOS 14:17 NOS DA UNA DEFINICIÓN DEL REINO DE DIOS "PORQUE EL REINO DE DIOS NO ES COMIDA NI BEBIDA, SINO JUSTICIA, PAZ Y GOZO EN EL ESPÍRITU SANTO". Aquí menciona que la justicia es parte de su reino y nos dice que el Espíritu Santo juega una parte esencial en alcanzar el Reino de Dios. En Hechos 1:8 nos menciona que el Espíritu Santo nos dará el poder para testificar a otros de Cristo. Este es el consolador que Jesús promete en Juan 15:26 el que dará testimonio de EL para evangelización de los inconversos. Nosotros predicamos pero es el Espíritu Santo el que hace la obra. Esto nos da a entender que el Reino de Dios es Cristo en el corazón y estar lleno de su Espíritu Santo. Esto lo podemos ver en Mateo 21:43 "Por tanto os digo, que el reino de Dios será quitado de vosotros, y será dado a gente que produzca los frutos de él". Esto ocurre cuando el evangelio de Jesús es rechazado por su propio pueblo y lo ofrece a los gentiles (los gentiles son todo aquel que no es Judío). En múltiples oraciones vemos cómo el evangelio de Jesús y el Reino de Dios son mencionados de tal forma que nos indica que son lo mismo. Otro ejemplo de esto está en Lucas 9:2 "Y los envió a predicar el Reino de Dios, y a sanar a los enfermos". Jesús usó mucho las parábolas para explicar los misterios el Reino de Dios.
¿Cómo alcanzar el Reino de Dios?
RESPONDIÓ JESÚS: "DE CIERTO, DE CIERTO TE DIGO, QUE EL QUE NO NACIERE DE AGUA Y DEL ESPÍRITU, NO PUEDE ENTRAR EN EL REINO DE DIOS". JUAN 3:5
Nacer de nuevo es aceptar a Jesús como nuestro salvador personal, entregar tu vida a Él. Para empezar, esto es lo primero y más importante y es la única forma de llegar al Reino de Dios.
JESÚS ES EL ÚNICO CAMINO AL REINO DE DIOS.
Esto nos hará herederos de su Reino. (1 Corintios 15:50)
Debe ser bautizado en las aguas. (Juan 3:5)
Estando dispuesto a sufrir por causa del Evangelio del Reino de Dios y a dejar atrás todo aquello que sea de estorbo o desagrade a Dios. (Mateo 5:10 y Lucas 9:61)
HACIENDO TU MÁXIMO ESFUERZO PARA LOGRAR ESTAR LLENO DEL ESPÍRITU SANTO. (ROMANOS 14:17)
AMAR A DIOS CON TODAS TUS FUERZAS Y A TU PRÓJIMO COMO A TI MISMO (MARCOS 12:33-34)
CUMPLIR CON LOS MANDAMIENTOS
Otro aspecto que no he mencionado es el reino como en un lugar definido. Aunque no sabemos exactamente dónde está, Dios tiene un lugar en los cielos donde Él está y donde están las almas de los redimidos que han muerto, los ángeles y el trono de Dios. Algunos llaman este lugar el tercer cielo donde la atmósfera de la tierra es el primer cielo y el espacio exterior donde están los planetas y estrellas es el segundo cielo. También la Biblia en Apocalipsis y otros libros escatológicos como Daniel nos habla del Reino de Dios que será establecido como un lugar físico que será establecido en el planeta Tierra en el futuro donde Cristo reinará sobre toda la Tierra y su reino no tendrá fin y como recompensa a los que buscamos el Reino de Dios reinaremos juntamente con El. Lea Romanos 8:17 y Apocalipsis 5:10. Aquel que entre al reino de los cielos participará de todas estas cosas.
SU JUSTICIA
¿Cómo podemos definir la Justicia? La justicia en general puede definir como una posición recta o comportamiento recto y de acuerdo con una norma ética. Generalmente pensamos en el aspecto judicial y de las leyes cuando hablamos de justicia y desde este aspecto se debe aplicar a todos por igual y no quitar su derecho a quien causa justa tiene. En particular nos interesa conocer cuál es la Justicia de Dios y cómo alcanzarla. El ser justo y hacer justicia es señal de que estamos sirviendo a Dios como dice en 1 Juan 2:29 "Si sabéis que él es justo, sabed también que todo el que hace justicia es nacido de él". También la Palabra nos dice que si buscas justicia la encontrarás Mateo 5:6 "Bienaventurados los que tienen hambre y sed de justicia, porque ellos serán saciados". Justicia es hacer el bien, lo justo y es cumplir con los mandamientos de Dios. Salmos 11:7. "Porque Jehová es justo, y ama la justicia; El hombre recto mirará su rostro". Proverbi 21:3. Hacer justicia y juicio es a Jehová Más agradable que sacrificio.
¿Y CÓMO BUSCAMOS LA JUSTICIA DE DIOS?
De acuerdo a Rom. 3:22 se alcanza a través de la fe en Jesucristo. Primero debemos ser hombres y mujeres de fe. Esto es lo más esencial para encontrar su justicia. Rom. 4:3 "Porque ¿qué dice la Escritura? Creyó Abraham a Dios, y le fue contado por justicia". También en Romanos 4:5 nos confirma que "la fe en Dios es la forma de alcanzar su justicia". "Dios recompensa al que hace justicia" (Proverbios 11:18)
Ahora que somos libres del pecado debemos servir a la justicia (Rom. 6:18).
Debemos ser instrumentos de justicia en cuerpo, mente y alma. Aquí se refiere a no usar el cuerpo como instrumento de pecado y a hacer con nuestras manos y cuerpo lo que es bueno y agrada a Dios. (Rom. 6:13)
Debemos andar conforme al espíritu (Romanos 8:4)
Debemos tener amor (1 Corintios 13:6)
Debemos usar la coraza de justicia que es parte de la armadura espiritual (Efesios 6:14)
Debemos estudiar y conocer la Palabra de Dios para que nos corrija y guie a la justicia (2 Timoteo 3:16)
Amar a tu prójimo es contado como justicia (1 Juan 3:10)
La oración te mantendrá en el camino de justicia. Sé una persona de oración (1 Reyes 8:49)
Seguir los mandamientos de Dios nos lleva a la justicia (Salmos 119:172)
Sé humilde. Evitando la vanagloria y no haciendo justicia o el bien solo para que te vean (Mateo 6:1)
Ayudar al pobre y al necesitado es un acto de justicia que agrada a Dios ( Job 29:12-14 )
Otras formas de hacer justicia que agradan a Dios se mencionan en Jeremías 22:3. "Así ha dicho Jehová: Haced juicio y justicia, y librad al oprimido de mano del opresor, y no engañéis ni robéis al extranjero, ni al huérfano ni a la viuda, ni derraméis sangre inocente en este lugar".
OBSTÁCULOS A LA JUSTICIA DE DIOS
Hacer justicia delante de los hombres, para ser vistos de ellos solo por las apariencias (Mateo 6:1y Mateo 23:25 )
El pecado no confesado (Juan 16:9 y 1 Juan 5:17)
La ira y el enojo (Santiago 1:20 y Romanos 2:8)
La mentira (Romanos 3:4)
La justicia propia (Filipenses 3:9)
Hacer el mal después de hacer el bien (Ezequiel 18:24)
CONCLUSIÓN
Teniendo ahora una mejor idea de lo que es el Reino de Dios y su Justicia y cómo buscarlos pongámoslo en práctica y descansemos en la sencillez de la fe que Dios te añadirá todo lo que necesites y más. Sólo recuerda presentar a Dios en oración todas las cosas en fe y el enviará respuesta. Resumiendo en Mateo 6:33 tenemos que: "DEDÍCATE A MÍ CON TODO TU ESFUERZO Y YO TE RECOMPENSARÉ EN ABUNDANCIA DE TAL FORMA QUE NO TENDRÁS NECESIDAD DE NADA".


martes, 27 de diciembre de 2016

LA BUENA VOLUNTAD DE DIOS ES: BUENA, AGRADABLE Y PERFECTA

A medida que nos vayamos acercando y relacionándonos con Dios, iremos  conociendo su divina Voluntad.
LA PALABRA DE DIOS DICE:No os conforméis a este siglo, sino transformaos por medio de la renovación de vuestro entendimiento, para que comprobéis cuál sea la buena voluntad de Dios, agradable y perfecta. (Romanos 12:2)
Nos dice que es: Buena, Agradable y Perfecta

Para poder entenderla debemos tener una mente renovada y entendida por medio el Espíritu santo, no conforme a este mundo. Solo así podremos comprobar la verdadera voluntad de Dios.
La Buena Voluntad de Dios:
¿Eres consciente de que la Noción de lo “bueno” viene de Dios?
¡Ser bueno es una característica de Dios!

Jesús le dijo: ¿Por qué me llamas bueno? Ninguno hay bueno, sino sólo uno, Dios. (Marcos 10:18)
Uno de los grandes engaños de Satanás es hacerle creer a la gente que Dios no es bueno, sino injusto y otras cosas más.

Cuando la serpiente se enfrentó a Eva, antes de la caída del hombre, le dijo que Dios no quería que comiera del árbol de la ciencia del bien y el mal porque eso traería como resultado ser como Dios.
Satanás le quería hacer ver a Eva que Dios era malo por no dejarle comer del fruto, el diablo estaba atacando el carácter de Dios y contrariando su voluntad.
Durante tu vida, es tu deber comprobar si Dios es bueno, primeramente reconociéndolo como tu Salvador y después teniendo una relación personal con su Palabra.
¡El error de sentirse atemorizado, aburrido o confundido en cuanto a la voluntad de Dios surge del hecho de no alcanzar a ver que la voluntad de Dios es buena, porque Él es Bueno!
La Agradable Voluntad de Dios:
El término “agradable” significa “sabroso”. Muchas personas dicen que la voluntad de Dios es agradable pero sencillamente no la pueden aceptar porque piensan que no se adapta a su personalidad.
Va más allá del nivel de comodidad en la que se encuentran. No obstante la Biblia nos enseña que la voluntad de Dios siempre será agradable.
¿Quién mejor para saber qué es lo más apropiado para tu vida que el Señor, que te creo, te dio vida y dio la vida por ti?
La Perfecta Voluntad de Dios:
“Perfecta” significa “completa”, ósea que no le falta nada. El hecho de seguir la voluntad de Dios te ayudara a nunca ver un callejón sin salida.
La Voluntad de Dios no te va a colocar en una situación de tu vida para luego desvanecerse dejándote a la deriva y sin saber qué es lo que está por delante. La voluntad de Dios es perfecta y no carece de nada.
Cuando decides en seguir el Plan de Dios para tu vida, un plan que es bueno, sabroso, y al cual no le falta nada ¿Qué motivos habría para que tengas miedo? ¿Porque tendrías que alejarte de Dios? ¿Porque razón tendrías que sentirte confundido?
A medida que busques la Voluntad de Dios, tu vida se ira volviendo más agradable y placentera.
Sin embargo siempre vendrán pruebas, por eso es fundamental que ante todo entiendas que pase lo que pase la Voluntad de Dios es buena, agradable y perfecta.

Dios te bendiga! 

EL SUFRIMIENTO POR LA ESCASEZ

EL EVANGELIO DE DIOS ES SOLO UNO

Amplios sectores de la iglesia evangélica actual están siguiendo ‘un evangelio diferente’. “NO QUE HAYA OTRO”, sino una perversión del verdadero (GÁLATAS 1:8). Entre otras cosas, ese ‘otro evangelio’ muestra como difícil de creer que un cristiano deba pasar por tiempos de necesidad económica. Así, se ha llegado al extremo de exorcizar a creyentes de los que se pretende echar, o al menos reprender, el “espíritu de pobreza”, bajo el supuesto de que el deseo de Dios es que todos sus hijos prosperen materialmente hasta enriquecer. Según esa falsa premisa, cualquier situación contraria al progreso económico de un hijo de Dios, sea enfermedad, desempleo o  escasez financiera, sólo puede ser producto de la falta de fe, de algún pecado oculto y no confesado, o en últimas, hasta del mismo Satanás.

IMAGINACIÓN O REVELACIÓN

Cuando se trata de entender a Dios, el hombre se ha trazado dos rutas. Una de ellas es la de la imaginación, la de hacerse un Dios según las expectativas y deseos humanos. Es una vía en la que la fe se construye con base en lo que, para su propio provecho egoísta, el hombre desea creer en su corazón que Dios habría mandado, ofrecido y prometido. El segundo camino es el de la revelación, el de considerar única y exclusivamente lo que está escrito en las páginas de la Biblia acerca de lo que Dios en verdad manda, ofrece y promete.

El ‘evangelio moderno’ ha optado por el primero de esos caminos, es decir, el de la imaginación, el de las fábulas, pues es una ruta menos exigente y más fácil de acomodar a los deseos naturales del corazón. Es un mensaje más fácil de creer para la mayoría. El evangelio bíblico, por su parte, sólo puede sustentarse en la revelación de Dios, lo cual es claramente menos popular. Toda persona, al final, debe decidir cuál de esas dos vías tomará: la de creer en su propia imaginación, o bien, la de confiar en las santas palabras de Dios plasmadas en las Escrituras, así sean difíciles de aceptar por el pensamiento natural.
UN TEMA ESCABROSO
Las finanzas. He allí un tema difícil de abordar, controversial y escabroso. La Biblia, por supuesto, no rehúye este asunto, sino que lo aborda desde diversos ángulos de una forma que no puede ser más clara, ni más sabia. Sin embargo ha sido, desde la perspectiva de ese ‘otro evangelio’, un tema que se sobre enfatiza y del cual incluso se predica según el gusto de la audiencia y del mundo.
El dinero es útil, y necesario para todos, sean individuos, familias, naciones… o iglesias. Sirve para todo lo necesario: la alimentación, el abrigo, la vivienda, la salud, la educación y hasta la proclamación del evangelio. Vemos por tanto que la Biblia no considera al dinero como malo en sí mismo. Pero, eso sí, nos advierte una y otra vez acerca de los grandes males asociados con el amor a las riquezas.
Siendo el dinero un medio para obtener toda clase de satisfactores, el corazón humano, “engañoso más que todas las cosas, y perverso” (Jeremías 17:9), puede ser presa fácil de la “avaricia, que es idolatría” (Colosenses 3:5). Así, el dinero termina siendo un señor a quien servir. Jesús enseñó a ese respecto que “ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará al otro. No pueden servir a Dios y a las riquezas” (Mateo 6:24)
Otras afirmaciones bíblicas sobre el tema nos recuerdan que “ha elegido Dios a los pobres de este mundo, para que sean ricos en fe y herederos del reino que ha prometido a los que le aman” (Santiago 2:5); y que, entre otras cosas, ni el “hambre o (la) desnudez”, como realidades ciertamente posibles, “nos podrá(n) separar del amor de Dios que es en Cristo Jesús Señor nuestro” (Romanos 8:35, 39).
Una correcta comprensión
No sobra aquí decir que los creyentes, como el resto del mundo, estamos continuamente en riesgo de padecer escasez. Los cristianos no somos la excepción cuando se trata de sufrir por causa de perder el empleo o de fracasar en el negocio emprendido. Nuestros ingresos pueden disminuir notablemente y nuestra condición financiera puede verse afectada por un sinfín de situaciones, muchas de ellas fuera de nuestro control.
Por causa de oír y de creer aquel ‘otro evangelio’, sin embargo, quizás te preguntas: ¿No debería mi fe en Dios mantenerme a salvo de la escasez? Haber confiado en el sacrificio de Jesús ¿no debería librarme de todo problema económico? ¿Me habrá Dios desamparado ahora que mis reservas casi se han agotado?
Si es tu caso, quiero presentarte a continuación cuatro elementos que te permitirán reconsiderar este asunto y ayudarte a confiar en Dios más allá de las circunstancias que enfrentas.
NADA ME FALTARÁ
Esa especie de neo evangelismo del que hemos venido hablando usa esta frase como consigna central y grito de guerra. Suele prometerse a los nuevos convertidos que la fe en Cristo garantiza que nada les faltará, y que eso significa que no volverán a padecer escasez, que saldrán de la pobreza, que no sufrirán por ninguna otra enfermedad y que el pan jamás les volverá a hacer falta.
Sin embargo, el evangelio verdadero no se enfoca en la provisión material para hoy, sino en la provisión espiritual para la eternidad; no en lo que Dios vaya a darnos, sino en lo que ya nos ha dado, que es a su Hijo. Cuando comprendemos que nuestra provisión principal es Cristo y no el pan material, nuestra situación financiera se vuelve un tema secundario. Entendemos que Dios puede amarnos y a la vez dejarnos pasar por necesidades materiales mediante las cuales moldea nuestros corazones y nos conduce al contentamiento en él, de modo que podamos decir como el apóstol Pablo: “sé vivir humildemente, y sé tener abundancia; en todo y por todo estoy enseñado, así para estar saciado como para tener hambre, así para tener abundancia como para padecer necesidad; todo lo puedo en Cristo que me fortalece” (Filipenses 4:12-13)
DELÉITATE
El ‘evangelio moderno’, plagado de vanidades ilusorias, garantiza que Dios dará al hombre absolutamente todo lo que éste desee: ascensos laborales, éxito en los negocios, autos lujosos, casas espaciosas, viajes de ensueño, carreras universitarias, logros profesionales, el amor de la pareja ideal según el estándar del mundo, e incluso cosas tan menores y extravagantes como el moldeado del cuerpo. El evangelio bíblico, por su parte, no garantiza que Dios concederá todo capricho vanidoso al hombre, sino que el Señor concederá las peticiones de un corazón que ha renunciado a todo por Cristo.
Se dice por ejemplo que Martín Lutero era un hombre al cual Dios le concedía todo lo que pedía en oración, porque lo único que pedía era a Cristo. De Job, por su parte, aprendemos que su gozo no provenía de sus bienes, sino de Aquel que se los había concedido, de modo que cuando los perdió pudo decir “desnudo salí del vientre de mi madre, y desnudo volveré allá. Jehová dio, y Jehová quitó; sea el nombre de Jehová bendito” (Job 1:21).
Imagine a un padre de familia que llega a casa cansado después de un duro día de trabajo llevando consigo un pequeño regalo para su hijo, y que éste corre hacia su padre para tomar arrebatadamente el obsequio sin siquiera dirigirle una mirada, un beso o una palabra de gratitud. El niño se deleita así en el regalo, y se olvida del rostro de amor de aquel que se lo trajo. Toda proporción guardada, este ejemplo retrata el mal corazón con el que a veces nos enfocamos en la provisión más que en el Proveedor.
Cuando Dios no nos provee según nuestros deseos, sino que nos hace transitar por épocas de ‘vacas flacas’ (Génesis 41:27), nos recuerda que vivimos en un mundo imperfecto y caído por causa del pecado en el que la tierra da su fruto con dificultad y duro trabajo (Génesis 3:17-19), lo cual es en sí mismo un antídoto contra nuestro apego a este lugar donde somos extranjeros y peregrinos (1Pedro 2:11). El mundo en que vivimos no es aún el reino de los cielos. Los creyentes somos parte de ese reino eterno por causa de la fe que nos fue dada, pero Dios nos debe recordar con frecuencia que aún no llegamos a nuestro destino final, que es estar con Cristo, lo cual es “muchísimo mejor” (Filipenses 1:23).
EL MANDATO OLVIDADO
“No codiciarás la casa de tu prójimo, no codiciarás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su criada, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo” (Éxodo 20:17).
Obedecer esta orden incrementa nuestro nivel de gratitud. Despreciarla implica, por su parte, la imposibilidad de contentarnos con lo que tenemos.
El deseo de tener es ciertamente lícito. Incluso, el deseo de guardar. En Egipto, José se ocupó de llenar todo granero y de preservar allí todo el alimento posible para afrontar los años de escasez que estaban por venir, lo cual es digno de reconocimiento, y necesario para la subsistencia. Sin embargo, siendo lícito, el deseo de obtener y de guardar puede crecer hasta extremos pecaminosos y conducirnos a la avaricia. ¿Y cómo saber si personalmente guardamos como José o, al contrario, guardamos con avaricia? Tendríamos que ver cuán desprendidos somos, cuán generosos para con el prójimo, para con nuestros hermanos, así como revisar en qué medida nuestra estabilidad emocional y nuestro contentamiento está conectado con nuestras reservas materiales.
La codicia consiste en el deseo de obtener satisfactores que produzcan una sensación de estabilidad al corazón. Este pecado coloca nuestra seguridad en las cosas, y no en el Dador de las cosas. Por su parte, el deseo cristiano de obtener y de guardar está enfocado en el servicio, en sustentar con amor la vida del prójimo y del hermano como hizo José con las naciones de la tierra que sufrían hambre. A diferencia de la codicia, que produce desasosiego e insatisfacción permanentes, el enfoque en el servicio trae paz y gozo al corazón; un gozo que persiste en tiempos de abundancia y en tiempos de escasez, pues recordamos que “vuestro Padre sabe de qué cosas tienen ustedes necesidad antes que le pidan” (Mateo 6:8)
TODO LES AYUDA A BIEN
Cada cosa que Dios permite a sus hijos vivir en esta tierra tiene siempre en sí misma una lección, y cada prueba una enseñanza mediante la cual el Señor nos perfecciona. Los cristianos estamos llamados a sufrir con este propósito y para la gloria de Dios. Hay una lección en el desempleo, hay una más en la escasez, lo mismo que hay lecciones en la enfermedad y en el negocio que se desmorona.
Experimentar el desamparo nos ayuda a entender que Jesús fue desamparado en la cruz para que todo aquel que cree en Él no sufra el desamparo eterno. La escasez de alimentos nos ayuda a recordar que el Señor no tenía “dónde recostar su cabeza” (Mateo 8:20), y que eso no fue problema para que nosotros, con su pobreza, fuéramos enriquecidos (2Corintios 8:9). De modo que si tenemos una almohada sobre la cual podemos dormir, demos gracias a Dios, pues el Amado del Padre renunció incluso a esa comodidad que hoy damos por sentada.

Descansemos pues en el Señor, confiemos y dependamos de Él, gocémonos y tengamos paz en nuestro Dios, “echando toda nuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de nosotros” (1Pedro 5:7). Y aprovechemos, finalmente, la invaluable oportunidad de conocerle más y mejor cuando atravesamos por dificultades, pues al Señor se le conoce mejor en la adversidad que cuando todo marcha bien.